¿Cuándo decidiste ser escritor?

Después de jubilarme entré a formar parte del grupo de teatro de un centro de mayores e interpretamos varias obras de teatro de humor, hasta el momento de no encontrar obras que se adaptaran a nuestro número de participantes. Fue en ese momento cuando empecé a escribir lo que yo he llamado: obras de teatro breve de humor. Al día de hoy llevo escritas doce obras de este formato.

¿Qué tipo de novelas son las que más te gusta escribir?

Las de ficción.

¿Cuál ha sido tu último libro?

Mi último, y primer libro, es El llanto de los cuerdos

¿Cómo se te ocurrió la idea de escribir tu último libro? ¿qué te inspiró?

La idea de escribir este libro está relacionada con el egoísmo de los hijos en relación con sus padres y viceversa. También de aquellos hijos que quieren ser libres y se marchan de casa, pero siguen viviendo a costa de ellos o de otras personas. Yo les llamo: libres dependientes.

¿Qué personaje de tus novelas es al que le tiene más cariño? ¿Por qué?

Todos mis personajes son como mis hijos.

Algunos creen que la vida de los escritores se reflejan en su obras ¿qué parte de ti se ha quedado en la novela?

No tengo ninguna relación con mis personajes. Son fruto de lo que en la calle.

¿Qué opinas de los soportes digitales para la lectura?

Si están ahí, es porque será necesario.

¿Te relacionas con tus lectores a través de las redes sociales?

La verdad es que no.

¿Cuál ha sido el último libro que has leído?

Los pilares de la tierra.

¿Quién es tu escritor favorito?

En primer logar Cervantes; y en la actualidad toda persona que es capaz de expresar lo que siente a través de un libro, es digno de admiración.

Si pudieras escoger sólo un libro ¿Cuál escogerías?

El Quijote. De hecho, una de mis obras de teatro breve de humor está relacionada con esta obra de El Quijote.

¿Qué nos puedes contar sobre tu próxima novela?

No se trata de Romeo y Julieta, pero por ahí van los tiros.

Punto final. ¿Quieres añadir algo a modo de despedida?

Que la lectura no hace daño... Y el escribir, para mí, es bueno y relaja.