¿Cuándo decidiste ser escritor?

Desde que tenía unos ocho años. Entonces pensaba en escribir novelas sobre un detective, aunque no llegué a iniciarlos. Por contra, todavía conservo con mucho cariño mi primer intento de relato largo, inacabado, inspirado en el antiguo Egipto. Era una gran historia que no descarto retomar en el futuro.

Posteriormente, muchos años después, escribí una novela titulada El faro del unicornio, con la que quedé tercer finalista del Premio Planeta en el año 2009, y a raíz de ese inesperado suceso transformé mi escritura en algo más que un hobby, en una forma casi profesionalizada de construir y crear historias.

Hoy en día no me concibo a mí mismo sin escribir.

¿Qué tipo de novelas son las que más te gusta escribir?

Realmente las ideas de historias que me surgen suelen tener como denominador común que están ambientadas en épocas pasadas, recientes o remotas.

Eso quiere decir que el género histórico es en el que me encuentro más cómodo, a pesar de que exige el esfuerzo extra de tener que documentarse de forma adecuada, algo que tal vez otros géneros, a priori, no requieren. Sin embargo, yo creo que en general siempre se estudian unas cuestiones u otras cuando se realiza el planteamiento de cualquier novela.

En cualquier caso, lo que me motiva es situar personajes de ficción, con sus particulares circunstancias personales, en marcos históricos reales que les den verosimilitud.

¿Cuál ha sido tu último libro?

En realidad mi último libro escrito forma parte del proyecto literario denominado genéricamente AMAPOLA NEGRA, con el que pretendo hacer algo que apenas se ha dado en la literatura, como es narrar en cuatro volúmenes todos los principales acontecimientos de la Primera Guerra Mundial, a través de personajes de ficción, mostrando el punto de vista de los dos bandos contendientes.

El primer volumen acaba de ver la luz y se titula AMAPOLA NEGRA I. 1914: GÉNESIS.

¿Cómo se te ocurrió la idea de escribir tu último libro? ¿qué te inspiró?

El proyecto literario AMAPOLA NEGRA surgió precisamente con la voluntad de paliar el desconocimiento que en general existe de un conflicto tan importante como la Gran Guerra, que marcó la historia de la humanidad de una manera decisiva, y cuyas consecuencias llegan al punto de no comprender la actualidad, nuestra época actual, si no es a través de las causas que la produjeron, de su desarrollo y de la forma en la que se le pretendió zanjar.

A partir del estudio de esa época he descubierto que ese conflicto marcó un antes y un después en la concepción del pensamiento humano, a nivel político, social, tecnológico, de igualdad de géneros, de salud, etc. Me sorprende que la literatura se haya dedicado de manera tan escasa a difundir y transmitir lo que supuso esta guerra. Y de ahí que ese sea ahora mismo mi principal objetivo y motor a la hora de completar el proyecto.

¿Qué personaje de tus novelas es al que le tiene más cariño? ¿Por qué?

De entrada he de decir que el protagonista de la novela El faro del unicornio, el Sr. Bücher (Libros, en alemán), dejó una profunda huella en mí, puesto que es imposible conocerlo y no adoptar una posición favorable o contraria a su persona. Es un personaje, por tanto, que no deja indiferente a nadie. Puedo contar una curiosidad, y es que en Amapola Negra I. 1914: Génesis me he permitido la licencia de hacer un guiño al Sr. Bücher en un episodio verídico de la guerra que le venía al pelo.

Pero también los personajes de AMAPOLA NEGRA desgranan una humanidad de la que resulta complicado sustraerse. Ninguno de ellos es un personaje puro, unidireccional, sino que cada uno tiene unas circunstancias personales, de origen geográfico o de otra índole, que le afectan en el desarrollo de su papel en la guerra en la cual se ven envueltos.

Además, estos personajes pertenecen a países poco tratados en la literatura de la Gran Guerra, destacando por encima de ellos Baltasar Moné, un empresario español, de Barcelona, que encarna el rol que desempeñó España en el conflicto.

Algunos creen que la vida de los escritores se reflejan en su obras ¿qué parte de ti se ha quedado en la novela?

Hay una frase del gran Juan Ramón Jiménez que leí hace poco que decía algo así como que él iba quedando en las obras que escribía, de tal modo que al final no quedaría nada material de él, sino él mismo plasmado en sus escritos. Me parece una definición muy bella de una situación que comparto, pues en el fondo, las obras le sobreviven a uno, y cuando el autor ya no está sobre la faz de la tierra, son sus obras las que reflejan aquello que fue.

Así pues, la respuesta verdadera a esta pregunta es: TODO.

¿Qué opinas de los soportes digitales para la lectura?

El libro digital ha llegado para quedarse. Esto es una realidad, y no se puede vivir pensando lo contrario. Por lo tanto, los soportes digitales, que tienen una serie de ventajas sobre el libro en papel, (de ahí que una mayoría de lectores que prueban la lectura digital ya no regresan al papel excepto en contadas ocasiones), estén en auge y haya que tenerlos en cuenta.

Eso no significa, ni mucho menos, que el papel vaya a desaparecer. Yo creo que convivirán durante mucho tiempo en perfecta, o casi perfecta, armonía. Sobre el futuro de cada soporte, solo el tiempo dirá...

¿Te relacionas con tus lectores a través de las redes sociales?

Supongo que no tanto como debería, y seguro que mucho menos de lo que me gustaría. Intento estar presente en las redes sociales, pero a veces no consigo estirar el tiempo tanto como desearía. Pido perdón a aquellos lectores que echen a faltar más presencia mía en las redes para compartir con ellos todo lo bueno que el mundo literario ofrece. Prometo aplicarme en el tema.

¿Quién es tu escritor favorito?

Tengo unos cuantos escritores que han marcado, de alguna manera, mi forma de concebir la literatura y los modos de narrar, de contar historias.

Uno de los primeros fue Luis Martín Santos. Posteriormente Günter Grass, al que siguió el grandísimo José Saramago. Y dos de los últimos descubrimientos han sido autores españoles, Antonio Muñoz Molina y Luis Landero.

¿Qué nos puedes contar sobre tu próxima novela?

La próxima novela, dentro del proyecto literario AMAPOLA NEGRA, será AMAPOLA NEGRA II. 1915-1916: ECLOSIÓN, que seguirá narrando las peripecias de los cinco personajes en los escenarios de la Gran Guerra correspondientes a esos años.

Punto final. ¿Quieres añadir algo a modo de despedida?

Ha sido un placer contestar vuestras preguntas, que me han hecho hurgar en lo más profundo de mi interior para expresar eso que a veces los escritores escondemos en nuestra alma. Os agradezco enormemente el interés que habéis puesto en mí y en mis novelas y os felicito por la labor de difusión de la literatura que realizáis.