«Adoro las novelas románticas. Durante toda mi vida he querido ser una de esas bellas heroínas que siempre consiguen su final feliz».
Carlota comienza su reencuentro con el amor con esta declaración de intenciones, que termina haciéndose realidad, tras un azaroso encadenamiento de situaciones que unas veces son rocambolescas y otras tiernas, pero que también resultan divertidas y románticas. La vida perfecta de Carlota se trunca cuando su novio la abandona por su mejor amiga dejándola con el corazón roto y una hipoteca prohibitiva que no puede pagar. Poco después, la despiden de su trabajo. Pero, lejos de hundirse, Carlota encuentra una luz en su particular túnel en forma de apuesto abogado de ojos azules, Pablo, al que hay que añadir el apoyo incondicional de su amigo Lolo.
Carlota en las alturas es una novela sobre segundas oportunidades salpimentada con algún malentendido y algunas dudas. Pese a no tener nada en común con las heroínas de las novelas románticas que devora compulsivamente, Carlota está a punto de conseguir también su final feliz.