Premio Eugenio Nadal 1972. Bajo este título groovy significa algo como "sensacional", "fabuloso", "maravilloso" -, y con una técnica innovadora que contrapone el monólogo interior a la rememoración retrospectiva, el autor ha escrito una novela aluciante y sobrecogedora sobre el mundo de los hippies: el drama amargo e hiriente de la corrupción de la inocencia narrado mediante la historia de una típica muchacha americana de la clase media que, tras abandonar sus estudios, se evade de su casa y de su ciudad para incorporarse a la comunidad hippy de Nueva York, a ese microcosmos que encarna las debilidades congenitas de una filosofía de la vida cuyo quietismo pasivo e inerte llevaba consigo los gérmenes de su propia destrucción y que debe dejar paso a unos postulados juveniles menos ingenuos que supongan una nueva alternativa y una dialéctica generacional mucho más operante y fecunda.