A los 34 años, con un cargo gerencial, arrogancia y belleza, Diana de Wit cree tenerlo todo bajo control. Lo primero en importancia, se dice a sí misma, es su familia: su esposo Oscar y sus gemelos de dos años. Les siguen los asuntos profesionales, los amantes y el sexo, además de sus padres y amigos. Oscar, un hombre moderno, está enterado de la existencia de “los otros” y de los interminables chateos nocturnos de su mujer, aunque prefiere ignorar los detalles de esas cacerías virtuales. Sin embargo, la compleja ingeniería de la vida de Diana se hará trizas: tras perder tontamente su anillo de bodas y tener relaciones sexuales sin protección con un amante varios años más joven, descubre que está embarazada. Con Oscar incluido, hay tres hombres como padres potenciales. Deberá resolver el conflicto a solas, mientras aquello que la sostenía se desmorona: su vida cotidiana, sus creencias y valores, su autosuficiencia. En Diosa de la caza, la autora más transgresora de Europa redobla la apuesta iniciada en sus novelas anteriores. Al provocador erotismo de sus historias, agrega la tensión dramática de un embarazo no deseado, el duelo por la juventud perdida y los dilemas ante la infidelidad propia y ajena. Heleen van Royen ha escrito una novela entretenida y audaz, que tiñe sus ya clásicas sátiras sobre las relaciones entre hombres y mujeres con uno de los grandes interrogantes actuales: ¿son incompatibles la familia y el placer?