La historia transcurre en una ciudad actual golpeada por la crisis económica, donde el estado de ánimo o la ansiedad se convierten en personajes a través de la mirada de Óscar Bargo, un investigador policial psíquicamente afectado y a punto de traspasar su propio límite emocional cuando comienza a darse cuenta de que no le gusta lo que ve. El desgaste es mucho más acentuado cada día que pasa y la soledad se mostrará como su único refugio.
Deberá afrontar un nuevo caso de homicidio en medio de una ola de calor que parece no dar tregua. La humildad le hará ver la realidad a la que se enfrenta, y descubrirá que la suerte será su única aliada, también la única frontera para aquellos que viven ajenos al peligro de un asesino suelto.
La historia es real, ha ocurrido, aunque no como se presenta en la novela. A menudo aparece en los medios y pasa desapercibida porque no nos afecta.