Un viejo pescador recoge en medio de una tormenta en el mar a una joven a punto de dar a luz. En tan desértico paraje el único lugar cercano es un convento donde la lleva, pero la joven muere en el parto. Sin ninguna idea acerca de su identidad, las dos hermanas gemelas (Yurina y Larissa) quedan al cuidado de las monjas, creciendo felices entre travesuras y rodeadas del cariño de Sor Juanita, hasta que cumplen los seis años. Trasladadas a un prestigioso internado continúan su educación sin más preocupaciones que convertirse en las mejores nadadoras del mundo, hasta que a los dieciocho años Yurina enloquece al perder a su hermana Larissa, víctima de su amor imposible por Daniel, un sacerdote que dos años después la salva a ella en el momento que, recluida en una institución psiquiátrica, ha decidido suicidarse. Logra convencerla ya que no le importa poner en peligro su vida, marcharse como voluntaria a un campamento de refugiados en pleno conflicto bélico. Allí salva al pequeño Marcelino en un grave ataque por parte de los grupos armados y conoce a Alexei, líder de un comando de élite, del que se enamora perdidamente participando en misiones muy arriesgadas. Hasta que es capturada por los rebeldes y retenida como rehén.